NO A UNA INDUSTRIA FRAGMENTADA

Post P煤blico 28/07/2016 34 1.811
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Llevamos años solicitando, por activa y por pasiva, una política industrial razonable y de largo recorrido para nuestra Comunidad. Una hoja de ruta que permita a las empresas, y con especial incidencia a las metalmecánicas, una mayor participación en el PIB valenciano para con ello propiciar consistencia y viabilidad a la economía valenciana, a la par que garantizar empleo de futuro y de calidad.

Con la actitud proactiva que nos caracteriza como federación, hemos ofrecido toda nuestra colaboración y aportado todo el conocimiento y herramientas a nuestro alcance a la Administración para su materialización. Entre ellas, participamos con el anterior Consell en la elaboración de los diferentes Planes Sectoriales de Competitividad y en las Estrategias de Política Industrial de la Comunidad Valenciana.

Es más, llegamos incluso a definir, entre las 35 asociaciones que conforman FEMEVAL, un “Plan Industrial para el Sector del Metal” en 2013 con un horizonte hasta 2017, que pusimos también a su disposición. En él, quedaba patente la unidad del sector metalmecánico en la reivindicación de unas medidas consensuadas que, a nuestro juicio, consideramos indispensables para revitalizar el metal.

Unas y otras actuaciones contemplan propuestas estructuradas desde el sentido común, necesarias y factibles. Pero, sobre todo, formuladas gracias a un diálogo abierto, al trabajo en equipo y a una clara visión de globalidad.

Por eso, a modo de reflexión, pensamos que con carácter prioritario a la puesta en marcha de planes de reindustrialización comarcales, debería prevalecer un plan director global que alcance a toda la Comunidad Valenciana. Dichos planes comarcales, que nos consta se están gestando, contemplan grandes objetivos que venimos reivindicando para el conjunto de la industria. Entre ellos, la cualificación del capital humano, fomentar la formación dual en las empresas, orientar las vocaciones en el Bachillerato hacia profesiones industriales, crear un observatorio de necesidades industriales o promocionar procesos de internacionalización de las empresas.

Son temas comunes y válidos para una industria que no entiende de segmentaciones ni de territorialidades. Una industria con una cada vez mayor apertura de miras hacia  mercados  globalizados y tecnológicos, que sabe que sus empresas tienen que ganar en dimensión vía colaboración y que necesita incorporar y retener talento.

Las comarcas que rodean la ciudad de Valencia concentran el 35% del total del sector metalmecánico. Esta diversificación y desconcentración geográfica le otorga un potencial que debe ser aprovechado, máxime por el efecto de arrastre que ejerce sobre otros sectores productivos. Pero también requiere de una unificación de criterios y esfuerzos para optimizar los pocos recursos existentes. Como suele decirse, hacer más con menos.

Ahora que llegan unos días de descanso estival, animo a que, pensemos la conveniencia de tener el citado plan director que aglutine los intereses y necesidades de nuestra industria, sin perjuicio de que los planes comarcales complementen las necesidades específicas de cada territorio.

Toca reflexionar. Felices vacaciones.