Creemos que es de vital importancia trabajar de persona a persona. No creemos que en acumular conocimientos esté la clave, y sí en que cada individuo tome consciencia de sí mismo y se responsabilice de su vida y su puesto, usando sus talentos. La responsabilidad no hay que usarla desde la culpa, la carga, o la obligación. La responsabilidad hay que usarla desde la motivación, la ilusión, la alegría y el afecto.

Vamos a dedicar dos horas a descubrir en la propia experiencia cómo el creer en uno mismo es la clave de la evolución del ser humano. Si nos ocupamos de descubrir qué somos y cómo somos estaremos fortaleciendo la confianza en nosotros mismos y desarrollando nuestro potencial como líderes. Dentro de cada persona está lo mejor y lo peor. La idea es tomar conciencia de ello para dar lo mejor y recibir lo mejor de los demás: "hacer que hagan" tus colaboradores, equipo etc... Liderazgo desde la motivación y la ilusión versus liderazgo desde la obligación y desgana. Analizaremos algunos obstáculos: las prisas, el uso de la mente racional y el miedo.