La Federación de Automoción de la Comunidad Valenciana (FAUTCOVA), integrada por las asociaciones de talleres de reparación de vehículos de Valencia (FEVAUTO-FEMEVAL), Alicante (ATAYAPA) y Castellón (ASTRAUTO), denuncia los retrasos sufridos por la retirada de los neumáticos fuera de uso de los talleres por parte de los gestores autorizados.
El almacenamiento creciente de neumáticos no solo limita el espacio disponible para su actividad diaria, si no que entraña también un peligro para la seguridad y salud del personal de los talleres. El caucho con el que están fabricados es un potente combustible, lo que incrementa considerablemente el riesgo de incendio y la carga de fuego de la actividad.
Al respecto, FAUTCOVA ha remitido un escrito de protesta a la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, por considerar que son deficiencias de los sistemas integrales de gestión (SIG), porque no solo están incumpliendo los plazos de retirada, sino que se están duplicando o triplicando.
La gestión de la recogida y retirada de los neumáticos fuera de uso está regulada por el Real Decreto 1619/2005, y los sistemas integrales de gestión (SIG), que en España corresponde a las entidades SIGNUS y TNU, son los autorizados para llevarla a cabo estableciendo sus propias condiciones respecto a cantidades mínimas y plazos. La cantidad mínima por la que un SIG acude a retirar los neumáticos es 100, pero los retrasos en la recogida están llegando a provocar una acumulación de hasta 400 unidades almacenadas. Esta situación, que no es exclusiva de la Comunidad Valenciana, ya se empezó a detectar antes del inicio de la pandemia.
No obstante, y aunque los talleres retomaron su total actividad a mediados de junio, la retirada de los neumáticos no ha recuperado la normalidad y la situación ha empeorado sobremanera. Este retraso está provocando problemas de espacio por la acumulación de ingentes cantidades de neumáticos usados en las instalaciones de un sector formado, en su mayor parte, por pymes y micropymes que desarrollan su actividad en naves de reducidas dimensiones.
Empresas, muchas de ellas, que se han visto obligadas a alquilar naves para almacenar los neumáticos usados. Esta situación afecta también a la actividad económica del taller y su competitividad, porque la falta de espacio obliga a dejar de ofrecer a la clientela el servicio de cambio de neumáticos. En ocasiones, se realizan recogidas parciales: los operadores autorizados por los SIG se llevan solo parte de los neumáticos fuera de uso, realizando previamente una selección y retirando aquellos que se encuentran en mejor estado para una posible reutilización. Muchos transportistas se niegan a recogerlos con grietas o deformaciones.
Desde el levantamiento del estado de alarma, la situación se ha agravado no solo en la Comunidad Valenciana, sino que es una tónica generalizada en toda España. Desde CETRAA, la Confederación Española de Talleres de Automoción, también se ha trasladado esta situación al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.